¿Conoces la diferencia entre champagne y espumante?
Por este lado del planeta, las altas temperaturas significa, para muchos, el momento ideal para compartir un buen champagne o vino espumante y disfrutar de la agradable sensación de frescor que deja en tu boca.
Se trata de dos tipos de vino muy populares, sin embargo, antes de escoger tu variedad favorita para brindar, vamos a aclarar un par de conceptos. ¿Has escuchado a alguien hablar del champagne como sinónimo de los vinos espumosos?
Seguro que más de una vez has cometido ese error. Es que no todo el mundo sabe que, aunque sea sutil, existe una diferencia entre champagne y espumante que marca distancia entre ambos conceptos. ¿Quieres saber de qué se trata?
¿Cuál es la diferencia entre espumante y champagne?
En simple, podríamos decir que todo champagne es un vino espumoso, sin embargo, no todos los espumantes se pueden llamar champagne. Este último tiene algunas particularidades que lo diferencia.
Pero ¿de qué depende esa diferencia entre champagne y vino espumante?
El origen
El champagne es un vino espumante con denominación de origen. Proviene de la región del mismo nombre, en Francia, un lugar famoso por el espumante que producen y que ha logrado popularizarse en todo el mundo.
Para ser considerado como champagne, además de ser elaborado en esa región francesa en particular, este tipo de vino debe cumplir con ciertos estándares, los que dependen, entre otras cosas, de las cepas utilizadas para su elaboración y del método con que se produce.
Por eso, si quieres compartir un champagne o vino espumante con tus amigos y seres queridos, recuerda mirar en la etiqueta para saber dónde fue elaborado.
En general, aquellos vinos que son clasificados como “champagne” lo señalan en la parte delantera de la etiqueta, de manera que destaca inmediatamente sobre otros espumantes.
El tipo de uva
Otra diferencia entre espumante y champagne es que, en el caso del primero, se puede usar cualquier cepa de uva, lo que da como resultado una gran variedad de vinos espumantes con características particulares que los diferencian, permitiendo disfrutar de una deliciosa gama de posibilidades.
En cambio, el champagne, cuya elaboración debe seguir lineamientos más estrictos, solo utiliza tres tipos de uva: Pinot Noir, Pinot Meunier y Chardonnay, que le dan un sabor característico y muy distintivo.
Método de producción
Existen diferentes métodos para producir vino espumante y esto también marca una diferencia entre champagne y espumante.
En el caso del champagne, se utiliza el método tradicional o “champenoise”, que implica que la segunda fermentación se realiza en botella, en contacto con las levaduras por varios meses.
Por su parte, la producción de los vinos espumosos puede basarse en otros métodos, dentro de los cuales destaca el Charmat. La principal diferencia entre champagne y vino espumante es que, en el Charmat, esa segunda fermentación se hace en tanques de acero inoxidable, lo que resalta su frescor y le da un estilo más afrutado.
Este es el método que Viña Cono Sur utiliza para la elaboración de sus espumantes más destacados. ¿Ya conoces nuestras variedades?
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